Soy Ángela y hoy voy a hablaros de las enfermedades
relacionadas con las neuronas, en concreto de las enfermedades de las neuronas
motoras. Estas neuronas motoras, ya como publicó Javier en una entrada, son las
responsables de que nosotros podamos caminar, tragar, hablar…es decir, que
controlan la actividad muscular voluntaria esencial. Normalmente, los mensajes
de las células nerviosas en el cerebro (llamadas neuronas motoras superiores)
se transmiten a las células nerviosas en el tallo cerebral y la médula espinal
(llamadas neuronas motoras inferiores) y de allí a los músculos particulares.
Las neuronas motoras superiores dirigen a las neuronas motoras inferiores para
producir movimientos como caminar y masticar. Las neuronas motoras inferiores
controlan el movimiento de los brazos, las piernas, el tórax, la cara, el
cuello y la lengua. Cuando estas señales son interrumpidas los movimientos
musculares se ven afectados y no funcionan correctamente, originando tics
incontrolables y debilitamiento gradual. Estas enfermedades se pueden heredar o
adquirirse. Pensareis ¿ y cómo podemos evitar que tengamos una enfermedad de la
neurona motora? Pues bien, los científicos aún están investigando a partir de
qué se desarrollan esta enfermedad. Los científicos, de momento, dicen que
pueden estar involucrados factores ambientales, tóxicos, virales, o genéticos.
Los casos esporádicos pueden estar desencadenados por la exposición a
radioterapia, rayos u otra lesión eléctrica, cánceres, o exposición prolongada
a drogas tóxicas o toxinas ambientales. Los científicos también están
investigando si la reacción autoinmunitaria del cuerpo a los virus tales como
el virus de inmunodeficiencia humana puede desencadenar estas enfermedades.
Los síntomas de esta enfermedad son muy variados y aquí sólo
vamos a hablar de las más características, las cuales son dos: La esclerosis lateral amiotrófica cuyos
síntomas empiezan en los brazos, en las piernas, los músculos de deglución
(aquellos que permite el paso del alimento desde la boca al estómago), reflejos
exagerados y calambres musculares. La otra característica es la parálisis
seudobulbar que se caracteriza por
degeneración de las neuronas motoras superiores y pérdida progresiva de la
capacidad de hablar, masticar y tragar. Esto provoca que las personas que
padecen esto desarrollen una voz grave, un aumento de los reflejos nauseosos y
la lengua permanece inmóvil, incapaz de sobresalir de la boca.
Seguramente penséis que con estas características y síntomas
esta enfermedad no tiene tratamiento alguno, pues sí que lo hay pero el
pronóstico varía dependiendo del tipo de enfermedad de la neurona motora y de
la edad al inicio. Hay unas, como la PLE evolucionan lentamente y otras con
pacientes con SMA no se deben de esperar de ellos una mejoría ya que es fatal
aunque se está investigando un tratamiento con células madre para curarla.
Espero que con esta entrada hayáis aprendido algo nuevo
sobre las neuronas y sus enfermedades...un saludo!